Estacia, de estar.
Mi estancia es permanencia.
En un estado sólido.
Mi estancia es mi cavidad en cada suspiro o respiración. Ahí me quiero quedar siempre. Respirando y
latiendo.
La estancia al cerrar los ojos se parece mucho a tenerlos abiertos y ver otros ojos. Los suyos. 
Los tuyos. 
Esa es mi permanencia. 
Una estancia física llena de nadas y de perdones. De lo sientos y culpabilidades. De por qués. 
De fechas marcadas a fuego en mi calendario vital.
Y ahora, luego y después vida.
Estar. 


Tahir

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